sábado, julio 20

Realidad.

Abrió sus ojos. Un débil haz de luz traspasaba las roídas cortinas que colgaban de la destartalada ventana. El polvo danzaba en el aire, a merced de su acompasada y casi imperceptible respiración. Había olor a pólvora. Inspiró fuertemente y se incorporó. Había pasado mucho tiempo dormida, sentada en el suelo con la espalda apoyada en la pared, y le dolía la columna. Aún sentía en sus mejillas el camino que con anterioridad crearon sus lágrimas, ahogadas en las comisuras de su boca. Se puso en pie lentamente, y caminó hacia la ventana, cubiertas con una capa de antigüedad acumulada desde antaño. Había un cristal roto. Miró afuera a través de él. Llamas, gritos y horror manaban del exterior. Alguien llorando, una súplica, y el sonido del derrumbamiento de un edificio. Ella sabía lo que era. La había observado desde hacía mucho tiempo a través de esa abertura. Conocía cada detalle de esa oscura visión, pero jamás se había enfrentado a ella. "La realidad.", susurró para sí misma, a la vez que corría las cortinas y volvía a quedarse dormida en el suelo, arrullada por el silencio que reinaba allí, en la mentira que inventó para esconderse del exterior.
"Don't you dare looking outside; darling, everything's on fire."

2 comentarios :

  1. Precioso texto, tanto como tu blog. Me enamora el diseño. Las palabras son geniales, sabes transmitir. Me quedo de seguidora :) Un saludo, te espero por mi blog!

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    1. Muchísimas gracias <3 Me alegro mucho de que te guste. Por supuesto, me paso.

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Amor animi arbitrio samitur non ponitur.