The perfect storm;

  Adelante, no tengas miedo. Algunos dicen que en mi interior no hay nada. Otros, que hay una tormenta. Personalmente, la describiría como guerra civil. Otros, no saben ni que respiro. No les importo. Si tienes valor y te gusta la aventura, te acompañaré en una visita guiada por los rincones más desconocidos de mi persona. Nadie sabe que existen, nadie se preguntan si están realmente. Yo soy la única consciente. Hay algo en tu mirada que me pide el permiso para entrar. Pero, me temo, que las paredes son inquebrantables. Habrá que buscar otra forma de entrar, podemos escalar, podemos caer, y rompernos. ¿Coincidencia? Sí, coincidencia que estemos ya acostumbrados a chocarnos una y otra vez contra el mismo suelo, cerrando los ojos convulsamente, esperando regocijados en nosotros mismos a que pase el dolor. Pero nos levantaremos, y volveremos a intentarlo. Una vez hayamos entrado, puedes sorprenderte de todo lo que descubras sobre mí, puede que te asustes, puede que no, pero no lo voy a ocultar, tú lo pediste. Podrás ver ambos bandos de mi ser, que se revelan el uno contra el otro, esa es la explicación del caos. Por eso, antes de nada, te pido un poco de tiempo. Tengo que dejar mi interior presentable. Ahora mismo, está todo sin norte ni sur. La estrella polar, básicamente, no ha vuelto a brillar.