miércoles, octubre 9

-

Quizás vuelvas a hundirte entre tus pensamientos, tus memorias, tus defectos y manías, tus sueños sin cumplir. Querrás coger aire pero tus pulmones no te dejarán, y tus demonios te arrastrarán más y más abajo, y te ahogarás por un segundo. Aguanta la respiración. Abre los ojos. Allí, a lo lejos, hay una luz que titila, muy débil, pero existe, está ahí. Es tu salida. Debes acoplar fuerzas de donde no sabías que tenías e intentar llegar hasta allí. No va a ser fácil, no va a ser rápido, pero lo vas a conseguir, lo sé. Y nunca, nunca te des por vencido. Cobardes no son aquellos que fallan, sino aquellos que tienen tanto miedo de fallar que ni siquiera lo intentan.

2 comentarios :

  1. Me encantó, sobre todo el final. Muy cierto.
    Besos

    ResponderEliminar
  2. muchas gracias por tu opinión. cosas que se me ocurren a las tres de la mañana, puede que el insomnio no sea tan malo xx :)

    ResponderEliminar

Amor animi arbitrio samitur non ponitur.